Gestión del conocimiento es un término que a muchas personas no les gusta, incluido yo mismo. En primer lugar, es un nombre inapropiado: no se puede “gestionar”, a nivel de organización o corporación, algo tan subjetivo y contextual como el conocimiento. Incluso es discutible si puede gestionar el conocimiento a personal nivel, porque no siempre sabemos lo que sabemos.
En segundo lugar, el término “gestión del conocimiento” se ha convertido en una de esas horribles palabras de moda de ITcliche, como (mi favorito personal) “apalancamiento” y “portal”. Las personas que quieren parecer importantes en las reuniones de negocios de TI, pero en realidad saben poco sobre TI, usan palabras de moda con frecuencia. por ejemplo, “Sí, estamos abordando eso con nuestras nuevas iniciativas de gestión del conocimiento, que aprovecharán nuestro portal web”.
Pero a pesar de estas fallas, el término ‘gestión del conocimiento’ es ampliamente aceptado como el nombre de una disciplina empresarial (junto con ‘contabilidad’ y ‘marketing’ y demás). Así que tiene sentido seguir la corriente y seguir usando el término. De hecho, lo he hecho en mi propia categorización de weblog, que en su mayoría coincide con las aplicaciones de mapeo de temas comunitarios que uso. No es mi propósito aquí intentar cambiar el término “gestión del conocimiento”. Sin embargo, quiero intentar comprender lo que es exactamente gestión del conocimiento y cómo se hace en el mundo real?
¿KM es una tontería?
Me encontré con un artículo interesante que desacredita algunos mitos sobre KM. Escrito por el profesor TD Wilson de la Universidad de Sheffield, el artículo se titula de forma provocativa El sentido de la “gestión del conocimiento”. El profesor investigó artículos de revistas que tenían el término “ gestión del conocimiento ” en sus títulos y descubrió que la garantía de tales artículos creció exponencialmente a partir de 1997. Sus datos nos llevan a 2002, que fue el pico pero también mostró signos de desaceleración. El profesor Wilson descubrió las siguientes tendencias entre las revistas que investigó (nota: he separado los puntos en una lista numerada):
1. Preocupación por la tecnología de la información.
2. Una tendencia a eludir la distinción entre “conocimiento” (lo que sé) e “información” (lo que puedo transmitir sobre lo que sé).
3. Confusión de la gestión de las prácticas laborales en la organización con la gestión del conocimiento.
Las 3 cosas anteriores no son las conclusiones del profesor, solo un extracto que he seleccionado que cubre lo que considero que son 3 puntos clave. Su conclusión real más adelante en ese documento es que KM es una “moda de gestión, promulgada principalmente por determinadas empresas de consultoría”. Puede que sea así, pero me interesa más qué es KM en la práctica en el mundo empresarial.
Practicas de trabajo
Quiero retomar el tercer punto de arriba, “gestión de las prácticas laborales en la organización”. Esto es descartado por el profesor Wilson en su conclusión como una “idea utópica”, pero creo que es un camino práctico hacia adelante para KM. La cosecha actual de herramientas de gestión de contenido personal y ‘software social’ (weblogs, wikis, etc.) ayudan a que los trabajadores individuales controlen la recopilación y el intercambio de información. De ninguna manera es una solución perfecta; he escrito antes que soy escéptico sobre cuántas personas ‘normales’ (ienon-geeks) usarán estas tecnologías. Pero aun así, tecnologías como los weblogs enfatizan subjetividad y contexto – que, como mencioné al principio de este artículo, son dos principios principales del ‘conocimiento’.
KM de abajo hacia arriba
Uno de los mejores artículos que he visto en KM fue escrito hace una semana por DavePollard. Lo tituló Confesiones de un CKO: Lo que debería haber hecho. Como indica el título, Dave solía ser un “Director de conocimientos” (creo que en Ernst & Young, si es así, ¡es una de las empresas de consultoría que el profesor Wilson eligió en su artículo!). En un artículo anterior, Dave había esbozado sus principios de GC y en este último artículo aborda la procesosSe basan en la siguiente observación:
“… Me di cuenta de que lo habíamos estado viendo todo mal, desde arriba, desde una perspectiva de sistemas, en lugar de desde el nivel del suelo, desde un nivel de actividad”.
Lo cual es otro de decir que KM debería ser de abajo hacia arriba, en lugar de de arriba hacia abajo, un tema sobre el que he escrito antes (como muchos otros en el mundo de los blogs).
Descripción del puesto de KM
Lo que realmente me llamó la atención sobre el artículo de Dave fue su “descripción de trabajo” ideal para KM, o “Mejora de la eficacia laboral”, como se llama aquí. Él describió 6 viñetas y he decidido cortar crudamente los puntos de acción de esos, lo que irónicamente pierde un poco el contexto. Pero, en general, hay muy pocos KM puntos de acción en el mundo (a diferencia de montones y montones de teoría de KM). Así que aquí va:
1. Introducir herramientas de gestión de contenido personal y redes sociales.
2. Proporcionar capacitación personalizada, herramientas, procesos sugeridos y ‘hojas de trucos’ a los trabajadores; además de ofrecer recomendaciones para cambios más sistemáticos.
3. Establecer estándares, procedimientos, filtros y medidas para reducir correos electrónicos innecesarios, flujos de información, trámites, reuniones e interrupciones.
4. Desarrollar programas de formación voluntaria.
5. Evaluar el costo agregado para la organización de la información; y evaluar objetivamente la adecuación, la calidad y la sobrecarga de la información, y recomendar cambios en las herramientas, los repositorios y los procesos.
6. Desarrollar un conjunto de principios de eficacia laboral.
Resumen
El punto clave que extraigo del artículo de Dave Pollard y del artículo del profesor Wilson es que la gestión del conocimiento no es solo un término para ser utilizado y abusado en reuniones de gestión y artículos de revistas. La gestión del conocimiento, a pesar de ser mal nombrada, es una ‘palabra de acción’ personal, colaborativa y activa. Se basa en la subjetividad y el contexto.
Permítanme ponerlo de esta manera: la gestión del conocimiento debería ser un verbo, no (como implica la palabra “gestión”) un sustantivo.
Nuestro trabajo como investigadores o profesionales de KM es habilitar ese entorno inorganizacional. Ahora … ¡si tan solo pudiera conseguir un trabajo así! Actualmente soy un Productor Web, pero prefiero trabajar a nivel de Análisis y Estrategia. Así que me interesaría saber cómo Dave Pollard se abrió camino para convertirse en CKO, ya que es algo a lo que me gustaría apuntar.
Tus 2 centavos
Me interesaría conocer los comentarios de los lectores sobre cómo se consigue un trabajo en el área de GC. Trabajas como KM [something]? ¿Qué hace en su trabajo para permitir la “gestión del conocimiento”?